lunes, 7 de abril de 2008

Salarios bajo cero


De todas partes llegan peticiones de moderación salarial. Y lo hacen en un país donde los salarios han crecido a lo largo de algunos de los últimos años por debajo de la inflación. Es decir, que han perdido poder adquisitivo. La receta mágica de las autoridades europeas pasa por ese estrechamiento de cinturón. Pero en España, con una tasa de subida de precios que supera en un punto a la media, es difícil reclamar más ajustes a los trabajadores. Es necesario, sin duda, pero antes tal vez habría que actuar con contundencia contra la inflación, en especial contra aquellos elementos sobre los que se puede incidir porque es más bien difícil influenciar sobre el encarecimiento de las materias primas a escala mundial. Más competencia comercial, en determinados sevicios... Eso seguro que, a la larga, dará buenos resultados. Es momento de actuar. El Gobierno central y los autonómicos tienen que ponerse las pilas. De lo contrario podemos acabar en una espiral precios-salarios de consecuencias imprevisibles. Por tanto, primero bájemenme ustedes la inflación. Luego podrán reclamar que se congelen los salarios.