sábado, 26 de julio de 2014

Soy catalán y tributo

Soy catalán y tributo. No es un contrasentido. Creo que es un buen momento para recordarlo. También hay catalanes que pagan sus impuestos, como manchegos, extremeños o madrileños. Y son la mayoría. Y hay que subrayarlo tras el terremoto provocado por las confesiones del 'expresident' de la Generalitat, Jordi Pujol, un referente de valores para muchos. A ver, dice el 'molt honorable' que no encontró el momento durante 34 años para regularizar (declarar) una herencia recibida de su padre. Ha habido tres amnistías fiscales durante la democracia y una última oportunidad hasta abril del año pasado para informar sobre los bienes que se tienen en el extranjero que, además supuso una inyección de fondos para las arcas de la Generalitat por la vía del impuesto del patrimonio. Ni siquiera por ese sipuesto ardor patriótico que le caracteriza lo hizo. Y ya no era 'president' ¿Qué le impedía hacerlo? ¿Los horarios de la Agencia Tributaria? ¿El qué dirán? Por más disculpas que pida, no tiene perdón. Yo pago y otros muchos también y no tenemos ni cuentas ni bienes ni en Andorra ni en Suiza. Y ni siquiera nos envolvemos en banderas.