
¿Desaceleración? El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha pronosticado en su último informe, además de un escenario global negativo, que la economía española crecerá este año apenas el 1,8%, menos de la mitad del 3,8% del año pasado. Eso empieza ya a parecerse más a un frenazo propiciado por el entorno internacional de cerrojazo crediticio y caída inmobiliaria que a una desaceleración. Todo ello se traducirá en desempleo, el peor azote para una economía. El futuro Gobierno tiene que empezar a ponerse las pilas con medidas destinadas a contener un desplome que puede ser muy doloroso en términos de empleo, gasto público y demás, si quiere evitar que la tendencia se traduzca en depresión o crisis. No sé si era el mejor momento para repartir 400 euros por contribuyente porque el superávit será muy necesario para poner el motor de la economía a punto. Por ello, José Luis Rodríguez Zapatero dijo que llamará a los sindicatos y la patronal. Tiene que hacerlo el mismo día que sea confirmado en el cargo de presidente del Gobierno. Es prioritario que se actúe y con el mayor consenso. Ya no hay metas electorales a corto plazo que puedan distorsionar tanto el pronóstico como las terapias. Ánimo.